El arte hay que sentirlo y sacarlo desde dentro. Para ello, nuestr@s pasqualines han podido pintar de forma abstracta, cerrando los ojos, dejando llevar sus manos plasmando lo que les hace sentir la música que están escuchando. También les sirve como actividad relajante para desconectar de la rutina de la mañana y volver a conectar con más fuerza.
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